Con inmensa generosidad la doctora Marta Cecilia Quicazan del ICTA nos visito en nuestra granja desde el jueves 26 en la tarde hasta el lunes 30 a medio día. Vino para ayudarnos en el proceso de producción de hidromiel; se trabajo en: utilización de levaduras, dosificación, prueba sensorial, procesos de esterilización, titulación, clarificación, fermentación y calidad entre otros temas.
Fue muy valioso para nuestro desarrollo tecnológico, la visita de una persona como ella, de grandes calidades: Humanas, tecnológicas y científicas.
Transcribimos el concepto que nos dio de su invaluable visita.
Enero 30 de 2012
Realmente ha sido un privilegio haber podido viajar este fin de semana a Rivera (Huila) a encontrarme con Pacho, su esposa Lolita y su hijo Nicolás. La idea inicial de conocer sus adelantos en la fabricación de vino de miel se convirtió en una vivencia maravillosa. La sola llegada a la finca llena la necesidad básica que todos tenemos de encontrarnos con la naturaleza; ver el lago, los arboles y la casa impactaron mis sentidos. Pero contar de cerca con la sabiduría de Pacho, unida a su gran generosidad, así como rencontrarme con Lolita y sentir que su ternura y amistad son inmensas y se han multiplicado con su bella familia, en la cual constituye el centro de estos grandes sentimientos, me han dejado un cúmulo de sensaciones de paz, que van mucho más allá de lo que pude imaginar.
Este vino de miel no se ha producido por casualidad, es fruto de mucho conocimiento y experiencia, además del amor por la naturaleza; su sabor y aroma reflejan todo este contexto de saber y sentimientos, elementos indispensables en toda actividad humana.